La compañía de alimentación catalana Casa Tarradellas continúa incrementando su negocio año tras año sin interrupción. También lo hizo en 2018, ejercicio cuyas cuentas acaba de depositar en el Registro Mercantil, donde volvió a confirmar las tendencias que definen a esta empresa en los últimos diez años: ventas al alza y beneficios sólidos.

La empresa propiedad de Josep Terradellas Arcarons registró una cifra de negocios de 928 millones de euros, un crecimiento del 2,1% en comparación con el año anterior y que le permite acercarse cada vez más a la frontera de los 1.000 millones, aunque a nivel porcentual dicho incremento es el menor que ha registrado en 10 años. Un periodo en el que, eso sí, ha multiplicado de forma exponencial su generación de ingresos, pasando de los 528 millones con los que cerró 2008 a esos 928 de 2018, 400 millones más o, lo que es lo mismo, un crecimiento del 75%.

Misma proporción han seguido los beneficios. Los de 2018 ascendieron a 24,8 millones, una mejora del 1,7%, y que supone el nivel de rentabilidad más alto de los últimos 10 ejercicios, según los datos consultados a través de la herramienta Insight View, lo que en la práctica supone también un nuevo récord para la compañía. Unos beneficios que fueron destinados en su totalidad a las reservas de la sociedad en lugar de al reparto de dividendo, una constante que Casa Tarradellas sigue cada ejercicio. La sociedad acumula ya un patrimonio neto de 374 millones de euros, más del doble que hace 10 años.

“Los beneficios que se obtengan en el futuro se destinarán a capitalizar la empresa y a la realización de nuevas inversiones que aseguren la competitividad a largo plazo”, especifica la empresa en su informe de gestión. En diciembre pasado, Casa Tarradellas compró a Nestlé el 60% de su negocio de carne envasada, Herta, por cerca de 400 millones.

La compañía catalana tiene entre sus principales clientes a Mercadona, del que es fabricante, entre otros productos, de sus pizzas frescas. A diferencia de otros proveedores, la compañía catalana no especifica qué parte de sus ingresos proceden de la empresa de supermercados. Sí las distingue por mercados: el 90,8% de las ventas fueron en España, y un 9,2% fuera, medio punto más que en 2017.

Las salvedades del auditor, un ‘pero’ habitual

Además de los crecimientos de ingresos y beneficios, las cuentas de cada año de Casa Tarradellas tienen otra circunstancia recurrente: las salvedades de su auditor. Estas son constantes desde las cuentas del ejercicio 2012, y por el mismo motivo: la empresa no comparte la información referente a partes vinculadas al considerarla “confidencial”.

Fuente: El País