El consejo de administración de la productora de aceite de oliva Deoleo, propietaria de marcas como Carbonell o Koipesol, ha aprobado un plan de inversiones de 50 millones de euros. Estos se destinarán a «la expansión en mercados internacionales con un alto potencial de crecimiento, en el apoyo a las marcas líderes con las que cuenta la compañía y en la búsqueda de acuerdos estratégicos de negocio con aquellos proveedores que defienden la calidad», según ha informado la compañía en un hecho relevante remitido a la CNMV.

De esa cantidad, 25 millones proceden de una ampliación de capital que suscribirá en su totalidad su accionista de referencia, el fondo CVC, y otros 25 de la ampliación de una línea de crédito revolving. Según la compañía, con esta operación culmina el plan de transformación acometido en 2017, y «se inicia un nuevo capítulo que impulsará el crecimiento comercial en los mercados globales».

Dentro de ese plan, 10 millones se destinarán a impulsar sus principales marcas: Carbonell, Bertolli y Carapelli, en los diferentes mercados en los que están presenten. El consejero delegado de Deoleo, Pierluigi Tosato, explicó hace unos días en un encuentro con medios de comunicación que buena parte del gasto se dedicará a la promoción en los establecimientos. «Queremos explicar bien al consumidor la diferencia entre un aceite de buena calidad y otro rancio», afirmó.

Deoleo cerró el ejercicio 2017 con unas pérdidas de 18,4 millones de euros, lo que supuso un recorte del 90% en el resultado negativo cosechado en 2016, cuando la dirección tuvo que declarar la causa de disolución

El grupo acometió un recorte en los costes operativos y gastos no recurrentes de un 60%, hasta los 14 millones de euros. Entre las medidas adoptadas destacaron el cierre de fábricas y el recorte de plantilla tanto en España como en Italia.

Fuente: Cinco Días