La coohorte de asesores en la reestructuración de Dia crece por momentos. El último fichaje es un viejo conocido en el mundo de las empresas en crisis: Houlihan Lokey. Este banco de inversión se une a Morgan Stanley, a PwC, Rothschild y a Linklaters para asesorar al grupo de distribución en sus planes para salir adelante. Esta firma experta en empresas con problemas estuvo a disposición de Pescanova y trabajó para los bonistas de Abengoa. Ni desde Dia ni desde el banco quisieron comentar esta información el pasado viernes.

Holulihan Lokey, liderada en España por Manuel Martínez-Fidalgo, ha participado en las grandes quiebras mundiales acacedidas desde 2000 a 2017; entre ellas, en Lehman Brothers (con 691.000 millones de dólares de activos), Washington Mutual (327.900 millones), WorldCom (103.900) y General Motors (91.000).

Las empresas españolas para las que ha trabajado Houlihan Lokey han conseguido salvarse, aunque han quedado reducidas a la mínima expresión. Su última actuación fue en Abengoa, donde logró que los bonistas de varias emisiones del grupo de ingeniería, para los que trabajaba, inyectasen dinero para el salvamento de la compañía andaluza. Si bien es cierto que, a tener de las circunstancias, la situación de Dia es menos mala qque  la de la compañía andaluza y también de Pescanova, a la que también asesoró, pues ambas que sufrieron respectivas quitas y tuvieron que vender activos estratégicos.

El grupo de supermercados Dia pactó el pasado 12 de diciembre con Morgan Stanley un compromiso de aseguramiento de 600 millones de euros de cara a una futura ampliación de capital por dicho importe, según ha anunciado la compañía en un hecho relevante. En su cotización actual, la capitalización de la compañía es de poco mas de 300 millones de euros, lo que implicará una muy fuerte dilución para sus accionistas.

Más información

Dia explica que espera cerrar esta semana la refinanciación de su deuda bancaria, que contemplan un plan de desinversiones para potenciar sus «áreas clave de negocio». Como ya anunció en sus últimos resultados trimestrales, esto implicará la venta de sus negocios Max Descuento y Clarel. En el hecho relevante, Dia reconoce por primera vez la puesta a la venta de su cadena de droguerías y perfumerías, lo que conlleva comenzar formalmente su desinversión.

Dia se ha desangrado en Bolsa desde la entrada en julio de 2017 de Mijail Fridman, que ahora tiene un 29% del capital, con una caída del 91,7%, ha reestructurado su cúpula directiva hasta la extenuación, ha corregido sus cuentas y ha lanzado un aviso a navegantes. Su ebitda este ejercicio será de un máximo de 400 millones, frente a los 568 de 2017.

Fuentes financieras señalan además que esa línea de la cuenta de resultados se situará en la parte baja del rango anunciado el pasado 15 de octubre, que partía de los 350 millones. Las fuentes consultadas anticipan unos 360 millones, lo que disparará la ratio de deuda neta –1.422 millones a cierre de septiembre–frente al ebitda hasta el entorno de las 4 veces, muy por encima del compromiso de 3,5 veces pactado con la banca.

Fuente: Cinco Días