El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes un crédito 13.830 millones que cubra el desfase entre ingresos y gastos de la Seguridad Social. Con este dinero, el Ministerio de Trabajo tiene previsto afrontar las pagas extraordinarias de verano y Navidad. Para el primer desembolso emplearán 7.500 millones; para el segundo, 6.330 millones, según un comunicado del departamento que dirige Magdalena Valerio.

Aunque se han aprobado en un viernes muy cargado de decreto ley, los 13.830 millones de este crédito vienen consignados en los presupuestos de 2018. En principio, ese préstamo iba a ser mayor, pero finalmente se redujo tras los pactos del PP con Ciudadanos y PNV para sacar las cuentas adelante.

Este año, en principio, el crédito también iba a ser mayor, 15.150 millones, a los que había que añadir una transferencia de 850 millones para la sostenibilidad financiera del sistema. Al ser rechazados las cuentas públicas de 2019, el Gobierno tiene que seguir la senda marcada en los presupuestos de 2018.

«La concesión del préstamo realizada hoy asegura el pago puntual de las pensiones y permite a la Seguridad Social planificar con suficiente antelación la disposición de recursos necesarios para hacer frente a estos desembolsos extraordinarios», apunta la Seguridad Social en un comunicado emitido tras el Consejo de Ministros.

El creciente déficit de la Seguridad Social desde 2011 y el agotamiento del Fondo de Reserva de la Seguridad Social, en el que restan unos 5.000 millones, llevó al Ejecutivo anterior a dar créditos al sistema de pensiones para afrontar su pago.

El Pacto de Toledo preveía el mantenimiento de esta política durante unos años más. En el preacuerdo parlamentario que descarriló a finales de febrero, se preveía que Hacienda empezara pronto a hacer transferencias, que no préstamos, a la Seguridad Social para cerrar el déficit, que ahora se sitúa en más de 18.000 millones. El plazo para cerrar el agujero se situó en 2025.

Fuente: El País