La Autoridad de Conducta Financiera de Reino Unido (FCA) ha impuesto al Banco Santander una multa de más de 35 millones de euros por sus «graves errores» en la gestión de las cuentas de los clientes fallecidos, según ha anunciado ese organismo de control. En total, 40.428 clientes se vieron afectados por el error, lo que supuso un total de 203 millones de euros que no fueron transferidos en el momento adecuado.

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«Es un principio rector fundamental en la industria de servicios financieros de Reino Unido que las firmas deben tratar a sus clientes de un modo justo. En este caso, el Santander falló en su obligación», afirma el comunicado final emitido por la FCA este mismo miércoles. Las obligaciones de los bancos respecto a las cuentas e inversiones de sus clientes, explica la nota, no cesan con la muerte del cliente. Las entidades deben cumplir con un proceso reglado, el llamado «proceso de legitimación y luto», que concluye con la transferencia de los fondos a aquellos que estén legitimados a recibirlos. «Hubo fallos graves en el proceso de legitimación y duelo del Santander y como resultado fue fallido», asegura la FCA.

La entidad española ha emitido un comunicado en el que acepta las conclusiones de la FCA y pide disculpas a los clientes afectados.»Santander de Reino Unido admite los descubrimientos de la FCA en su comunicado final del 19 de diciembre de 2018 y pide disculpas a las familias y beneficiarios de los clientes fallecidos que resultaron afectadas por los errores detectados en los procesos de legitimación y duelo. Santander ha finalizado un completo ejercicio de rastreo y ha completado con éxito la transferencia de la mayoría de los fondos depositados en las cuentas de clientes fallecidos a sus legítimos beneficiarios, con intereses compensatorios en los casos apropiados», dice el banco.

Reducción de la multa por un acuerdo

«El Santander accedió a un acuerdo previo en una fase previa de la investigación de la FCA, y por tanto tuvo derecho a un descuento del 30%, según las reglas ejecutivas de la entidad relativas a los acuerdos de conformidad. Si no hubiera sido por este descuento, la FCA hubiera impuesto una sanción financiera de 52 millones de euros», añade el organismo.

La FCA reconoce, en cualquier caso, que la entidad financiera tuvo problemas similares a los de otras entidades con un proceso que resulta complejo. «La FCA acepta que el desarrollo del proceso de legitimación y duelo ha sido y continúa siendo un reto para toda la industria. No está en disputa que el Santander realizó esfuerzos considerables para mejorarlo en su conjunto. Sin embargo, en los asuntos a los que hace referencia este comunicado, queda claro que la conducta del Santander quedó por debajo de las exigencias regulatorias», concluye.

Fuente: El País