El Santander y los sindicatos CC OO, FITC, UGT y STS, que representan al 85,54% de la mesa negociadora, han firmado un acuerdo este martes por el que han cerrado el Expediente de regulación de empleo (ERE) que afectará a 1.100 empleados mediante prejubilaciones y bajas incentivadas. El objetivo es adelgazar las plantillas de los servicios centrales en España tras la absorción del Banco Popular en junio pasado.

Para los representantes sindicales es un «acuerdo equilibrado» y recuerda que con la nueva legislación laboral, una empresa en beneficios como el Santander puede tomar medidas como esta «incluso sin acuerdo sindical». 

Los sindicatos han destacado en su nota que tras el acuerdo «se reduce de manera muy significativa la propuesta inicial del Santander», que afectaba a 1.585 personas, un 30,6% más que la pacto actual. También apuntan que «todas las extinciones deben realizarse por el camino de la voluntariedad y las condiciones acordadas así lo facilitan a través de prejubilaciones en su inmensa mayoría, para las personas mayores de 55 años. También existe un paquete de condiciones para el colectivo entre 50 y 54, que iguala las condiciones del anterior ajuste» que el Santander hizo en su sede central de Boadilla del Monte (Madrid).

El acuerdo incluye, entre otras condiciones, el pago del 100% del convenio especial de la seguridad social por parte del Santander a todos los afectados desde los 50 años. A los que están entre los 54 y 50 años, el Santander les ofrece salidas con el 80% del salario, así como diversas primas en función de la antigüedad de cada trabajador.

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Ofertas a los menores de 50 años

El banco hace ofertas a los menores de 50 años: 40 días por año con un límite de 24 mensualidades más 2.000 euros por cada trienio completo cumplido en el banco. Además, ofrece primas adicionales por años de antigüedad «en el caso de adscripción voluntaria». Estas primas van desde los 4.000 euros para los que han estado menos de cinco años, hasta los 30.000 euros para los que lleven 25 o más años trabajando en la entidad.

También se contempla la recolocación de 575 empleados de los servicios centrales de Popular en otras empresas del Grupo Santander, principalmente en el área de Tecnología, y el acoplamiento de otros 100 trabajadores en la red comercial de ambas entidades. Por su parte, 22 empleados de Santander España serán recolocados en otras empresas del grupo.

De este modo, sumando salidas y recolocaciones, el proceso de integración supondrá una reducción de plantilla del 25%, aproximadamente, en los servicios centrales de Santander y Popular tras la adquisición de esta última a principios de junio al precio simbólico de un euro.

Además, la consultora Lee Hecht Harrison, contratada por Santander en el marco del proceso, se ha comprometido a recolocar al 80% de los trabajadores que salgan de la entidad y deseen seguir trabajando en el plazo de 12 meses, tanto en España como en el extranjero, según el deseo de los interesados.

Por el momento, la red comercial de ambas entidades no se ve afectada en el marco del ERE, pues su integración no se prevé hasta el año 2019, una vez culminada la integración tecnológica.

Fuente: El País