El propietario francés de la marca de lujo Gucci, Kering,debe alrededor de 1.400 millones de euros  a Italia en impuestos, según las conclusiones de un auditoria estatal.

La investigación examinó las actividades la filial suiza de Kering desde 2011 a 2017, si bien la compañía recurrirá las conclusiones de la auditoría italiana. La investigación arrancó con la mirada puesta en la filial francesa de la compañía por sus cuentas de 2017.

Los analistas de Citi habían estimado que Kering podría tener que hacer frente a un pago de 1.300  a 2.000 millones de euros. Aunque la responsabilidad inicial está en el rango esperado y «no debería sorprender», la compañía podría enfrentar multas adicionales, asegura en un anota John Guy, analista de Mainfirst Bank. La empresa «ha realizado provisiones por este tema, de manera que el impacto en resultados será menor», añade. 

El informe del auditor será revisado por la agencia tributaria italiana, que luego hará una conclusión final, de acuerdo con la declaración. Kering dijo que no dispone de información suficiente para hacer una provisión contable para afrontar este cargo, si bien ha añadido que pondrá en marcha un estricto control de sus riesgos fiscales.

El periódico digital francés Mediapart había informado de que la compañía facturaba por negocios realizados en otros países en un suizo centro logístico, donde pagaba tasas de impuestos más bajas de lo que lo que lo haría en Italia.

Fuente: Cinco Días