La asignación que recibe anualmente la Casa del Rey aumentará en 2018 un 0,87%, al pasar de los 7.818.890 euros del pasado ejercicio a 7.887.150 euros. La subida de la asignación presupuestaria viene después de cuatro años de recortes, dos de congelación y una subida del 0,56 por ciento en 2017, según consta en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2018 entregados hoy en el Congreso por Cristóbal Montoro.

Pese a la pequeña subida de este año, el Presupuesto de la Casa del Rey está aún lejos del periodo antes de la crisis, cuando el en 2009 tocó un máximo de 8,9 millones de euros, un 2,7% más que en 2008. En 2010, la Casa del Rey a petición propia, vio congelado el presupuesto respecto al año anterior, mientras que en 2011 sufrió el primer recorte de su historia, con una rebaja del presupuesto del 5,2%, lo que dejó sus cuentas en 8.434.280 euros. No fue la última. Volvió a bajar en 2012 (un 2%, hasta 8.264.280 euros), en 2013 (un 4%, hasta 7.933.710 euros) y en 2014 (un 2%, hasta 7.775.040 euros). En el nivel de 2014 quedó congelado durante tres años.

Según establece la Constitución en su artículo 65.1, el rey Felipe VI «distribuye libremente», a su criterio, esa asignación. Él decide, pues, su sueldo y el de la familia real compuesta actualmente por el Rey, la reina Letizia y los Reyes eméritos (Juan Carlos y Sofía), la princesa Leonor y la infanta Sofía—, así como la distribución del resto del dinero.

Ahora falta de que la Casa del Rey disponga cómo va a gastar los ocho millones de euros de 2018. En 2017, el 48% se destinó a gastos de personal, el 37% a gastos corrientes en bienes y servicios, el 8,6% a la familia real, el 5,8% a inversiones y el 0,8% fue al fondo de contingencia. En concreto, Felipe VI percibió 239.908 euros en 2017 y doña Letizia recibió 131.400 euros. En el caso del Rey emérito la cuantía fue de 191.124 euros y a doña Sofía correspondieron 107.520 euros.

Fuente: El País