La Agencia Europea del Medio Ambiente señala que el 13% de las partículas contaminantes en los 28 países de la Unión Europea provienen del transporte por carretera; la alternativa real a los motores de combustión son los eléctricos, que van dejando atrás algunas de sus desventajas iniciales. Como el precio, por ejemplo: siguen siendo más caros que los modelos tradicionales, pero las ayudas de la administración (con subvenciones de hasta 5.500 euros según los diferentes planes de apoyo del Gobierno) animan a los conductores, que también se benefician de algunas exenciones fiscales y del precio de la electricidad, mucho menor que el de los combustibles tradicionales.
En cuanto a la autonomía, otro de los recelos de los automovilistas, los modelos actuales han mejorado mucho y cubren sobradamente las necesidades urbanas de cualquier conductor. Y es cierto que en carretera todavía generan cierta inseguridad (ante la ausencia de una infraestructura adecuada de recarga), pero la evolución de las baterías será probablemente rápida. De momento, estos son los coches eléctricos que más seducen a los conductores.
Renault Zoe RENAULT ZOE
Nacido directamente como eléctrico puro (no basado en una versión anterior), el modelo de la marca francesa ofrece una autonomía teórica de 403 kilómetros que se quedan en unos 300 cuando se conduce de forma despreocupada. Una buena cifra. Y sus 92 CV responden bien en ciudad, correctamente en carretera y de modo aceptable en autopista, y el comportamiento también es adecuado en zonas de curvas. Pese a su pequeño tamaño (4,08 metros), el Renault Zoe permite un acceso cómodo y, además, es capaz de alojar a cinco adultos, aunque los de atrás irán algo apretados. La pantalla central ofrece una información muy completa que ayuda a entender el coche. Como contrapartida, el interior resulta algo austero, con pocos detalles y una tapicería de calidad no muy alta.
Nissan Leaf NISSAN LEAF
El eléctrico más vendido del mundo tiene también una muy buena aceptación en España, y todavía más ahora que la marca japonesa ha actualizado el modelo. Y lo ha mejorado mucho: aparte de que la autonomía real supera los 300 kilómetros, el modelo incluye el sistema ProPilot de conducción semiautónoma, capaz de ocuparse de todo por sí solo en autopista (siempre por el mismo carril, eso sí). El nuevo Nissan Leaf se conduce mejor (la dirección es mucho más directa y precisa) y el diseño también ha mejorado notablemente, tanto por dentro como por fuera, y lo mismo ocurre con el equipamiento tecnológico. Como novedad mecánica, el e-Pedal permite acelerar y frenar por completo el coche con el acelerador, al mismo tiempo que se regenera energía. Pero no todo ha mejorado: la comodidad interior y la habitabilidad no son su fuerte, y menos para un coche de su tamaño (4,48 metros).
BMW i3 BMW i3
Seguramente sea uno de los modelos eléctricos más originales de cuantos se comercializan en España, con un diseño sofisticado y distintivo, de aspecto evidentemente futurista. El eléctrico más llamativo. Pero para decidirse por él hay que sopesarlo bien y saber con exactitud qué uso se le va a dar: las ventajas son muchas, pero también hay unos cuantos inconvenientes.
Entre los aspectos positivos, por ejemplo, destacan un motor muy potente (170 CV) y una aceleración propia de modelos de alma deportiva: de 0 a 100 km/h en 7,3 segundos. Y esto se traduce en que es ágil, rápido y muy divertido para moverse por la ciudad. Además, la autonomía ha mejorado y alcanza los 300 km oficiales (hasta 230 de uso real). Y es un BMW, con todo el carácter (y la calidad) que ofrece la marca alemana.
En el otro lado de la balanza, aspectos como un maletero pequeño, solo cuatro plazas y un acceso complicado a las plazas traseras. Además, es bastante más caro que sus competidores.
Smart Fortwo SMART FORTWO
Otro eléctrico con espíritu urbano que despliega todas las virtudes de su hermano de combustión (un coche ágil, sencillo de conducir y fácil de aparcar) y añade algunas ventajas nuevas, como un nuevo diseño muy atractivo y una oferta especial junto con una compañía eléctrica: 10.000 kilómetros de recargas gratis. Además, si el conductor va a hacer un viaje largo por carretera, la marca le ofrece un Mercedes en alquiler a un precio especial.
De lo que no puede presumir demasiado el Smart eléctrico (que también se comercializa en las versiones Cabrio y Forfour) es de autonomía, que se queda en unos 120 kilómetros de uso real. No es mucho, aunque para la ciudad puede ser suficiente.
Volkswagen e-Golf VOLKSWAGEN E-GOLF
El compacto alemán lleva ya casi cuatro años en el mercado y en 2017 dio un gran salto de calidad con una nueva versión: la autonomía aumentó hasta los 300 kilómetros oficiales (hasta 230-240 en uso real) y el motor ganó también potencia para llegar hasta 136 CV. Tampoco está nada mal la aceleración (de 0 a 100 km/h en 9,6 segundos), mientras que la velocidad máxima está limitada a 150 km/h. En cuanto a la conducción, silenciosa y relajante como en la mayoría de los eléctricos, se trata de uno de los modelos que más se asemeja al comportamiento de los coches tradicionales.
A todo lo anterior se suman las virtudes de los Golf de combustión en cuanto a imagen, espacio, presentación y calidad de conjunto, pero también hay inconvenientes: el precio es bastante elevado y el maletero resulta muy reducido.
Fuente: El País