
El ministro de Justicia de Turquía, Abdulhamit Gül, ha confirmado este sábado que han pasado a prisión preventiva cinco de los siete detenidos por la fuga del expresidente de Renault-Nissan, Carlos Ghosn, acusado en Japón de irregularidades financieras. La Justicia turca se ha incautado de dos aeronaves de una aerolínea privada, según aseguró el ministro durante una entrevista con la agencia turca Anadolu. Aunque no dio nombres, se trata a todas luces de la compañía turca MNG, dedicada al alquiler de aviones privados, que ya el viernes confirmó la implicación de uno de sus empleados.
El pasado jueves, las autoridades arrestaron a siete personas en relación con la fuga de Ghosn al Líbano a través del aeropuerto estambulí de Atatürk. Dos de los detenidos han sido puestos en libertad, mientras que para el resto -cuatro pilotos, de los que dos habían estado de servicio en los aviones empleados para el delito, y un director de una empresa de carga privada- se decretó prisión preventiva.
Ghosn, de 65 años, que estaba en libertad bajo fianza en Tokio desde el pasado 25 de abril y a la espera del juicio por las irregularidades financieras de las que se le acusa, apareció el pasado martes en Beirut después de salir clandestinamente de Japón. Aparentemente, el multimillonario prófugo voló primero desde la ciudad nipona de Osaka al aeropuerto Atatürk, y desde allí al Líbano.
Hasta el momento Turquía no ha recibido una petición formal de colaboración jurídica por parte de Japón, sino que la investigación en curso se basa en la sospecha de violación de las leyes turcas.
Una persona «ansiosa»
El caso de la rocambolesca huida del exdirectivo sigue generando polémica en Japón. Este sábado uno de los abogados nipones que defenía a Carlos Ghosn aseguró sentirse «furioso y traicionado» por su fuga, pero mostró su comprensión ante la decisión y su temor a no tener un juicio justo en el país. «Mi cliente Carlos Ghosn salió de Japón el 29 de diciembre de 2019, ignorando las condiciones de su libertad bajo fianza», empieza el texto publicado en el blog personal de Takashi Takano, uno de los abogados del exdirectivo, que estaba esperando el inicio del juicio por las irregularidades financieras de las que se le acusa. El texto recoge varias conversaciones con el empresario sobre su temor a no obtener un juicio justo en Japón. «Sus preguntas y ansiedad parecían haber crecido a medida que avanzaba el proceso», relata el letrado en el texto. «Se sentía desesperado, entre otras cosas, por las condiciones de la fianza».
Fuente: El País