Telefónica ha dado los primeros pasos para la salida de Centroamérica. Tras vender en 2013 un 40% del capital de los negocios en la región a Corporación Multi Inversión, sus responsables firmaron el pasado jueves en Nueva York la venta de su participación en las filiales de Guatemala y El Salvador a América Móvil, el grupo controlado por Carlos Slim. La transacción está valorada en 570 millones de euros, con un importe para el grupo español es de 342 millones.

La operación supone para Telefónica un paso más en su estrategia de salida de los pequeños países para concentrarse en los grandes mercados. La teleco aplicó esta política entre 2013 y 2014 en Europa con la venta de las filiales en países como Irlanda, República Checa y Eslovaquia. El paso siguiente entonces fue reforzar la presencia en Alemania y Brasil, con las compras de E-Plus y GVT, respectivamente.

En este sentido, según los analistas de Santander, la venta acordada ahora es un paso más dado por Telefónica en la simplificación de su portfolio de activos, especialmente en Hispanoamérica Norte. La simplificación favorecería la gestión al concentrarse en menos mercados.

Los movimientos no van a quedar ahí. En el mercado se apuesta por que Telefónica cierre también las ventas de sus filiales en Nicaragua, Panamá y Costa Rica. En el hecho relevante del pasado 22 de enero, en el que la compañía reconocía que estaba en negociaciones para la venta de sus activos en Centroamérica, indicó que los contactos podrían “derivar en una transacción, tanto por el total, como por alguno de dichos activos”.

Millicom

Entre los grupos interesados en estos activos centroamericanos de Telefónica figura Millicom. Esta compañía recibió en los últimos días muestras de interés por parte de Liberty Latin America para una posible fusión, pero finalmente las conversaciones no han fructificado. Eso sí, de fondo queda la sensación de que tanto Millicom como Liberty quieren crecer en la región, con lo que los activos de Telefónica entrarían en su campo de visión para afrontar ese crecimiento inorgánico.

En el escenario sigue también la posible venta de Telefónica México, operación que la teleco ha negociado con grupos como Cerberus. De momento, Telefónica ha vendido recientemente diversas redes de fibra óptica en el país, por 31 millones de euros.

Para Telefónica, la operación de Guatemala y El Salvador tiene igualmente dos ejes que debía cumplir. Así, la operadora ha vendido ambas compañías a un valor de 9,7 veces el Oibda de 2018, por encima del consenso del mercado así como del valor en que cotizan las operadoras latinoamericanas. Para América Móvil, con la incorporación de los activos podría encontrar nuevas vías para obtener sinergias. “Aunque la operación es pequeña, el acuerdo ofrece una valoración positiva, generando sinergias para las tres partes”, señaló el Santander.

Además, con la venta, Telefónica confirma uno de los mensajes de mayor trascendencia que ha estado enviando al mercado durante el último año, que no es otro que el vinculado a la revisión de sus activos para la mejora de los retornos. Según Goldman Sachs, el anunció debería ser bien recibido como una prueba del compromiso de Telefónica para la venta de activos con el objetivo de obtener mayores retornos.

Posiciones de los implicados

Telefónica. Pese a la venta de los activos, el conjunto de Latinoamérica seguirá teniendo un peso decisivo para la operadora española. En los nueve primeros meses del año, los mercados latinoamericanos aportaron cerca del 40% de los ingresos de la compañía, pese a la depreciación de monedas como el peso argentino y el real brasileño.

América Móvil. Las adquisiciones en Guatemala y El Salvador refuerzan a la compañía de Carlos Slim en ambos países. Según Ovum, la cuota de mercado en ambos países aumentará del 28,9% y 31,7% actual, al 45,7 y 55,1%, respectivamente. Según Bloomberg Intelligence, América Móvil ganará escala y eficiencias de capital.

Fuente: Cinco Días