Carlos Torres, recién nombrado presidente de BBVA, ha enviado una carta a empleados del banco dando explicaciones sobre la implicación del banco en el supuesto espionaje masivo a empresarios, políticos y periodistas encargado por el banco al comisario José Villarejo. Torres, según la agencia Bloomberg, ha admitido que el banco contrató a Villarejo, ahora encarcelado, y ha calificado el espionaje de «deplorable», en caso de ser cierto.

Según la información publicada por los digitales El Confidencial y Moncloa.com, el actual presidente de honor del BBVA, Francisco González, contrató a través de su jefe de seguridad los servicios de VIllarejo para defenderse del intento de Sacyr por entrar en el capital y en el consejo del banco. De acuerdo a dichas informaciones, Villarejo controló varios miles de teléfonos de empresarios relevantes en la operación, como el del presidente de Sacyr, Luis del Rivero o el de Juan Abelló, además de políticos como Miguel Sebastián (entonces director de la oficina económica del Gobierno) la vicepresidente María Teresa Fernández de la Vega o periodistas. BBVA ya  desveló este jueves que en junio del año 2018 ya inició una investigación “sobre la contratación y los servicios prestados” por la agencia Grupo Cenyt,

Villarejo habría sido contratado para adelantarse a los movimientos de Sacyr, que a finales de 2004 comunicó a la CNMV a finales de noviembre de 2004 su intención de tomar un 5% en el capital del banco, y posteriormente informó la compra del 3,1% vía derivados. La operación fue considerada hostil por el BBVA, ya férreamente controlado por González tras haber descabalgado al llamado «clan de Neguri» en 2002 gracias al descubrimiento de cuentas secretas en Jersey de algunos directivos.

En enero la CNMV inició una investigación sobre presuntas irregularidades en la venta de la sociedad de valores de González, FG Valores, a Merrill Lynch en 1996, investigación que fue abandonada poco después. Manuel Conthe era presidente de la CNMV en aquella época y Carlos Arenillas, vicepresidente.

La operación se desarrolló bajo acusaciones de politización. Miguel Sebastián, que había trabajado bajo el mando del gallego en calidad de responsable del servicio de estudios, fue citado como cerebro de la operación contra González, junto a Luis del Rivero, presidente de Sacyr, y Juan Abelló, que se ofreció en diciembre a comprar un 0,5% del banco. En febrero Sacyr renunció a la operación.

Villarejo se encuentra en prisión desde 2017 por la Operación Tándem, una red a gran escala de espionaje y tráfico de información confidencial que se mantuvo operativa durante dos décadas. El policía está acusado de pertenencia a organización criminal, cohecho y blanqueo de capitales, y ha amenazado reiteradamente con hacer pública información confidencial muy sensible sobre las instituciones del Estado.

Fuente: Cinco Días