España mantendrá un crecimiento robusto este año en comparación con otras economías de la zona euro. El avance previsto es del 2,8% en 2018 (una décima menos de lo que pronosticó en mayo) y del 2,4% para 2019, donde no hay cambios. La mayor debilidad del crecimiento de 2018 está vinculada a los altos precios del petróleo y cierta debilidad en el sector exterior. Para Francia, la Comisión Europea espera este año un alza del PIB del 1,7%; para Alemania, del 1,9%; para Italia, del 1,3%; y para Portugal, del 2,2%.

«La economía de España creció un 3,1% en 2017 y continúa mostrando, hasta ahora, poca señal de desaceleración», señala el análisis de la Comisión Europea. En el primer trimestre del año, en comparación con el anterior, el PIB se expandió en 0,7%, sin cambios desde los dos trimestres anteriores. Y los indicadores, recuerda Bruselas, apuntan hacia una tendencia similar en el segundo trimestre del año. Como ya avanzó también el Banco de España, «la composición del crecimiento en el primer trimestre revela unas exportaciones netas y una inversión no relacionada con la construcción más débiles de lo esperado, que compensan con un fuerte consumo y la construcción de viviendas». 

De cara al año completo, la Comisión apunta que el consumo y la inversión en la construcción se espera que continúe tirando con fuerza de la economía. Pero advierte que «el aumento más elevado de los precios del petróleo desde la primavera se espera que tenga un impacto negativo en la demanda en 2018 y, en menor medida, en 2019. Además, en un entorno exterior menos favorable, la contribución neta de las exportaciones al crecimiento debería resultar un poco más pequeña».

Pese a esas dos advertencias, solo recorta una décima la previsión de 2018, y eso, tras haberla elevado tres décimas en mayo, del 2,6% al 2,9%. Porque considera que el consumo interno va a seguir equilibrando la balanza a favor de España. En el lado de las aportaciones que van a ser más positivas de lo calculado antes, recuerda Bruselas que en los Presupuestos Generales de 2018 de España se han incluido «medidas expansivas adicionales». No las cita específcamente, pero las cuentas incluyeron una subida de las pensiones del 1,6%, una subida del sueldo de los funcionarios y algunos retoques fiscales. Las medidas expansivas, dice, proporcionarán un impulso al crecimiento en 2018, principalmente a través del consumo». Además, el gasto del consumidor también debería beneficiarse de un salario real «mayor al esperado», así como de la dinámica de creación de empleo.

Fuente: El País