CaixaBank ganó 1.684 millones de euros en 2017, el 60,9% más que el ejercicio anterior, según ha comunicado la entidad que preside Jordi Gual este viernes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El resultado recoge la integración del banco portugués BPI, cuya oferta pública de adquisición (opa) culminó en febrero del año pasado. Excluyendo la aportación de la entidad lusa, de 176 millones de euros, el resultado se hubiera situado en 1.508 millones de euros, el 44,1% más respecto al mismo periodo de 2016. En el comunicado remitido a la CNMV el banco resalta que cerró el año con el «mayor resultado anual de su historia», que arranca en 2011. La Caixa como grupo superó en 2006 los 3.000 millones de beneficio, cuando aún agrupaba tanto el negocio financiero como las participadas.
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La entidad de origen catalán presenta este viernes resultados en Valencia, donde trasladó su sede social en octubre por la inestabilidad política que vivió Cataluña tras el referéndum independentista del 1 de octubre y ante la amenaza de una declaración unilateral de independencia. A pesar de ello, la entidad cerró el año con el mejor resultado desde su creación en 2011 tras realizar unas dotaciones de 799 millones de euros (un 154,2% más) que la entidad justifica en la «liberación» de 676 millones de euros de provisiones de la cartera crediticia en el cuarto trimestre de 2016 «tras el desarrollo de modelos internos» referidos a la Circular 4/2016. Sin ese efecto, las provisiones hubieran descendido un 19,3%. La entidad también registró unas dotaciones de 912 millones que incluyen, entre otras cosas, 455 millones asociados a prejublaciones y 154 millones a saneamientos por su participación en el banco malo.
El margen de intereses del banco, que mide la actividad puramente bancaria, creció un 14,2%. En un contexto de tipos de interés en mínimos, este margen creció gracias sobre todo a la incorporación de BPI, que aportó un 9,1% de crecimiento. Las comisiones, asimismo, subieron un 19,5%, hasta los 2.499 millones, y lo hicieron también de forma más intensa en la banca portuguesa (13,2%). Los ingresos del banco por su cartera de participadas descendieron, en cambio, un 21%, a causa del menor dividendo de Telefónica y la venta del 2% de la participación de BPI en el banco angoleño BFA. El margen bruto alcanzó los 8.222 millones de euros, un 5,1%, que la entidad atribuye a la «mayor generación de ingresoscore».
Los recursos totales de clientes del grupo se situaron, según ha informado la entidad a la CNMV, en 349.458 millones de euros, el 15% más tras integrar el banco portugués. Solo mirando CaixaBank, lo hicieron un 3,5%, aunque en el ultimo trimestre bajaron un leve 0,2%. El ratio de morosidad siguió bajando hasta el 6%, frente al 6,9% de diciembre de 2016, por debajo de la media del sector, y la cobertura de esa cartera mejoró en tres puntos hasta el 50%. También descendió la cartera de activos adjudicados netos para la venta en España, hasta los 5.878 millones de euros, mientas que el total de ventas de inmuebles alcanzó los 1.610 millones de euros, un 20% más que en el mismo periodo de 2016. El resultado de las ventas sobre el valor contable, según el banco, se situó en un 20%.
Fuente: El País