El Ibex ha contado esta semana las sesiones por caídas. Suma ya cinco días de recortes (todos los de la semana) y cede un 1,65%. Cierra la semana por debajo de los 10.200 aunque aún no dilapida todo lo ganado la semana anterior (la mejor desde mayo). Afronta, con pocas esperanzas ya de subirse a un rally de fin de año, unas jornadas decisivas antes de las elecciones en Cataluña del próximo jueves.

Ni los rumores sobre un acuerdo en EE UU para dar la luz verde definitiva a la reforma fiscal de Trump ni una semana de calado en política monetaria han conseguido sacar a las Bolsas de su indefinición. Tampoco la cuádriple hora bruja ha traído a las Bolsas la volatilidad prevista. Este acontecimiento se produce cuatro veces al año, cuando coinciden a la vez los vencimientos de opciones y futuros sobre acciones e índices.

Entre el miércoles y el jueves se celebraron las reuniones de tipos de la Reserva Federal, el BCE y el Banco de Inglaterra sin que ninguno de los bancos centrales se saliese del guion previsto. Yellen se despidió del cargo con la tercera subida de tipos del año, tal y como estaba previsto, y de las palabras de Draghi no trascendieron grandes pistas de los plazos de la institución. Pese a la mejora de las previsiones de crecimiento en Europa, las dudas sobre la inflación siguen pesando y el italiano ha arrojado un jarro de agua fría sobre cuándo subirá el precio del dinero del histórico 0%.

Ni tan siquiera en la renta fija la política monetaria ha tenido un gran correlato. El euro recuperó momentáneamente los 1,18 euros tras la cumbre de la Fed, pero corrigió después y termina la semana por debajo de esta cota. La rentabilidad del bono español a 10 años se situó en el 1,46%.

En cuanto a la deuda de otros países periféricos, tras la última subasta del Tesoro Portugués celebrada el viernes, la prima de riesgo lusa se sitúa por debajo de la italiana por primera vez desde 2015 (cuando Draghi empezó a desplegar su artillería), en los 147,9 puntos básicos.

En Bolsa española, la atención ha estado sobre uno de los pesos pesados del Ibex: Inditex. El emporio textil de Amancio Ortega sorprendió en los resultados trimestrales presentados el miércoles y subió un 1,72%. Pese a ello, una mala recomendación de Credit Suisse y las decepcionantes cuentas de su competidor H&M le han provocado encadenar un recorte del 3% en la semana.

El otro protagonista de la semana ha sido Bankia. Ha caído más de un 4%, depsués de que el FROB culminase esta semana la segunda colocación de un 7% de su participación en la entidad con un descuento del 2,7%.

En las alzas ha destacado Indra, que sube un 1,7% tras haber recibido varias recomendaciones positivas en las casas de análisis. Algo que también ha apoyado a la acción de Ferrovial, que ha subido este viernes un 1,58%. 

Fuente: Cinco Días