España es el segundo país de la Unión Europea (UE) con menos puestos de trabajo vacantes, según los datos del tercer trimestre de 2017 publicados este lunes por Eurostat, la oficina de europea de estadística. Así, España registra un 0,8% de empleos sin cubrir —un 0,1% más que en el mismo periodo de 2016—, frente al 2% de la media de la Unión Europea y el 1,9% de la Zona euro.
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Solo Grecia registra una cifra más baja, el 0,5%. Le siguen Bulgaria, con un 0,8% (la misma tasa que España) y Portugal, con un 0,9%. Precisamente los dos países con menos puestos de trabajo, Grecia y España, son los que tienen mayor tasa de paro de la UE. Grecia un 21,2% registrado en el segundo trimestre de 2017, —última cifra disponible—, seguido de España, con un 16,7% en el tercer trimestre de 2017, según Eurostat.
Por el contrario, los países europeos con una mayor tasa de empleos vacantes son República Checa, con un 4,1%, Bélgica con un 3,6%, Alemania con una tasa del 2,7% y Austria y Reino Unido, ambos con un 2,6% y todos por encima de la media de la Unión Europea. Los puestos de trabajo vacantes se definen como aquellas posiciones pagadas para las que los empleadores buscan activamente a nuevos candidatos fuera de la propia empresa para que entren a cubrir el trabajo inmediatamente o en futuro próximo.
En cuanto a la clasificación por sectores, Eurostat hace distinción entre la industria y la construcción y los servicios. España es el país de la Unión Europea con menos ofertas de trabajo en la construcción en el tercer trimestre de 2017, solo con un 0,3% de puestos vacantes, exactamente el mismo porcentaje que en el mismo periodo del año anterior. La media de la Zona euro se sitúa en el 1,6% y el de la Unión Europea en el 1,7% de oferta de trabajo en construcción.
En el sector servicios España también registra el menor número de ofertas de empleo, en este caso junto con Bulgaria, ambos con un 0,5%. En el caso de España se mantiene la misma cantidad que en el mismo periodo de 2016. Por su parte, la eurozona registra una tasa del 2,2% y la Unión Europea un 2,3%.
Fuente: El País