La larga batalla de patentes lanzada por Oracle entra en una fase complicada para Google, después de que un tribunal federal de apelaciones en Estados Unidos determinara que la tecnológica de Mountain View violó los derechos de autor al utilizar de manera injusta el código de programación Java al desarrollar el sistema operativo que hace funcionar los dispositivos Android.

El golpe puede ser mayor para la filial de Alphabet ya que podría que tener que hacer frente a una compensación de miles de millones de dólares por el uso ilegítimo de la tecnología de Oracle, que en su día le demandó un pago de 9.000 millones por copiar líneas información que están en la base de los programas que hacen funcionar las aplicaciones de los teléfonos y los portales en Internet.

Oracle cree que Google debería haberle pagado la licencia para su uso o escrito su propio código. El mayor buscador en Internet, que entonces estaba dirigido por Eric Schmidt, insiste en que creí que podía usar el Java con libertad. La solución del litigio, por tanto, tendrá implicaciones más allá de las financieras, porque puede cambiar cómo las compañías tecnológicas desarrollan sus programas.

El litigio dura ya ocho años. El lenguaje de programación Java fue creado por Sun Microsystems, compañía que Oracle adquirió por 7.400 millones en abril de 2009 y en la que trabajó Schmidt. La demanda llegó un año después, cuando se completó la integración. Se celebraron ya dos juicios desde entonces, en los que se puso del lado de Google al considerar que Java no necesitaba protección legal.

El tribunal de apelaciones revierte el último veredicto de 2016, al considerar que hay parte del código que no se utilizaron de manera justa parte. Google se limita a decir que estudia cuales son sus opciones y recuerda que Java es un lenguaje abierto. También advierte que elevará los costes para el consumidor. El juez que en San Francisco siguió el caso debe determinar la cantidad que deberá pagar.

Los expertos legales no descartan que la compensación pueda superar a la que solicitaba inicialmente Oracle, porque el uso de ese código se disparó durante los últimos años. Como mínimo dan por hecho que se superarán los 1.300 millones que recibió la compañía en 2010 en la batalla de patentes con SAP. Lo que no se puede cuantificar es el impacto en los desarrolladores de sus propias plataformas.

Fuente: El País