El cucuyo es un coleóptero —familia del escarabajo— de la América tropical, con dos manchas amarillentas a los lados del tórax por las cuales despide de noche una viva luz azulada. Y también es el nombre de una cafetería de acero inoxidable que imita su forma, fabricada mediante impresión 3D. Es el último diseño de MX3D, un estudio de Ámsterdam especializado en aleaciones de metales. Se utiliza como café y se contempla como obra de arte en el edificio del nuevo Pérez Art Museum Miami (antiguo Museo de Arte de Miami), de los arquitectos suizos Herzog & de Meuron. Cucuyo retrotrae a los veranos de la infancia, a la caza de insectos luminosos en el jardín. Su caparazón abierto, explican sus creadores, da un aire de protección al tiempo que deja pasar la brisa de Cayo Vizcaíno. La estructura pesa solo 320 kilos y mide seis metros de largo, tres de alto y cuatro de ancho. El objetivo es que sea funcional, pero también liviana y fácil de desmontar para poder cambiarla de ubicación en caso de que los eventos del museo así lo requieran o cuando llegue uno de los temidos y habituales huracanes.

Los diseños los genera el ordenador imitando patrones de la naturaleza. ¿Más eficientes y elegantes que los creados por el hombre?

MX3D produce por encargo, explica Gijs van der Velden, cofundador de la empresa: “Todo aquel que quiera hacer algo nuevo e innovador con metal está invitado a contactarnos”. En el caso de Cucuyo, fue una propuesta del grupo de restauración Starr para el estudio de arquitectura BBA, de Miami, que a su vez pidió colaboración a MX3D para utilizar sus técnicas de fabricación 3D. “Nuestro objetivo principal es reducir la cantidad de materiales necesarios para crear una estructura, lo cual es fantástico para el medio ambiente”. Su máquina desarrolla diseños generados por ordenador, “que no solo son más eficientes sino a menudo también mucho más elegantes”, presume el experto. “Los diseños suelen imitar la manera de crear de la naturaleza. En el futuro, con la impresión 3D, se podrá evitar la producción de residuos, mejorando la estética, y sin que suponga un coste adicional”. El estudio está trabajando ahora en varios proyectos para la industria, la arquitectura y el arte, y en un puente de acero inoxidable para conectar las orillas de Oudezijds Achterburgwal, uno de los canales más viejos y famosos del Barrio Rojo de Ámsterdam.

Fuente: El País