La Asociación Española de Banca (AEB) abrirá el próximo 12 de febrero una delegación en Bruselas, un movimiento estratégico tras el trasvase de poderes hacia las instituciones comunitarias que ha supuesto la unión bancaria.
La patronal bancaria, presidida por José María Roldán, considera esencial intensificar la presencia en el nuevo centro de poder del sector y estrechar las relaciones con unos organismos que desde 2014 han asumido la supervisión de las entidades financieras españolas y tienen la última palabra en procesos tan importantes como la resolución de Banco Popular. La oficina de Bruselas consolida el lobby europeo de la AEB, impulsado a finales de 2016 con la apertura de una delegación en Fráncfort, sede del Mecanismo Único de Supervisión.
Fuentes del sector celebran la ofensiva de la patronal tras varios años en que la banca española ha soportado el rigor de las instituciones comunitarias. El duro tratamiento comenzó con el rescate bancario de 2012, en el que se impusieron pérdidas y quitas a los inversores aun antes de que se aprobaran las normas europeas que introdujeron ese instrumento.
Y la puntilla llegó en junio de 2017, cuando el recién creado Mecanismo Único de Resolución se estrenó con la intervención de la sexta entidad del país, Banco Popular, en una operación que ha provocado una avalancha de recursos y litigios. La presencia permanente de la AEB en Bruselas acerca a la patronal española a la de otros países, que llevan años maniobrando en la capital comunitaria y ejerciendo un potente lobby sobre las instituciones comunitarias.
La delegación de la AEB se instalará en la sede de la Federación Bancaria Europea, en pleno corazón del barrio europeo de Bruselas. “Con esta oficina se pretende potenciar la relación y cooperación de los bancos españoles asociados a la AEB con las autoridades comunitarias y con la propia Federación de Bancos Europeos, con las que trabajamos de forma muy intensa y cercana”, señalan fuentes de la AEB en la recta final de los preparativos del desembarco en Bruselas.
La nueva oficina consolida la estrategia europea de la patronal tras la creación de la unión bancaria
Fuentes del sector confían en que la asociación española redoble su presencia en unos foros donde ya tenían gran presencia otras patronales nacionales como la italiana o la francesa. Italia pasa por ser el país más activo. La banca italiana se ha revuelto a menudo, y con éxito, contra medidas regulatorias impulsadas por la Comisión Europea o por el BCE. En el contraataque más reciente, no dudaron en movilizar hasta al presidente del Parlamento Europeo, el italiano Antonio Tajani, para frenar un endurecimiento de las provisiones por préstamos morosos. Tajani acusó por escrito al BCE de extralimitarse en sus competencias.
Fuentes de la AEB señalan que no desean seguir el modelo de italiano porque, a su juicio, “no refleja fortaleza sino fragilidad”. La patronal española se decanta por un lobby más constructivo, atento a los intereses del sector pero sin demandar excepciones ni tratos de favor porque, aseguran, no los necesitan.
Fuente: Cinco Días