Estos datos, según Antonio Zoido, presidente de Bolsas y Mercados Españoles (BME), reflejan «el intenso proceso de apertura al exterior tanto del mercado bursátil español como especialmente de las empresas cotizadas». Las familias españolas repiten como segundo propietario de la Bolsa con una participación del 23,4%, frente al mínimo del 20% marcado en 2007.

El Ibex 35, el principal índice bursátil del país, acumula una subida del 9,1% desde enero. El comportamiento del selectivo fue mejor durante la primera parte del curso, llegando a revalorizarse hasta un 21%. «Pero la tensión política, en particular en España, y otras incertidumbres mundiales han influido de forma negativa en los últimos meses, deteriorando la comparación con el comportamiento de otros mercados», reconoció Zoido.

La Bolsa española volvió a estar entre las líderes del mundo en financiación con 39.000 millones de euros facilitados a las empresas mediante ampliaciones de capital y OPVs. En total, ha habido 23 nuevas empresas que han saltado al parqué, captando 4.290 millones. En Bolsa se ha estrenado cinco empresas (Prosegur Cash, Neinor Homes, Gestamp, Aedas Homes y Unicaja), y 18 empresas han sido admitidas hasta hoy en el mercado alternativo bursátil (MAB). Este segmento ha sido especialmente activo en la admisión de sociedades inmobiliarias (socimis): ya son 48 las presentes en los mercados de BME, con una capitalización que asciende a 20.000 millones de euros.

España ha vuelto a ser uno de los mercados que mejor retribuyen a los accionistas. En total, los grupos cotizados han distribuido entre sus propietarios dividendos por valor de 25.000 millones. «La rentabilidad por dividiendo de la Bolsa continúa siendo una de las más atractivas al superar la media del 4%», destacó Zoido.

El presidente de BME destacó que en términos de valoración las Bolsas europeas, y en particular la española, se han quedado rezagadas frente a Wall Street. «Los principales índices estadounidenses alcanzaban hasta diciembre rentabilidades por encima de la media mundial y máximos históricos de forma encadenada. Este desarrollo suscita cautelas sobre su sostenibilidad», advirtió el máximo dirigente del mercado español.

Zoido avanzó que 2018 también podría ser un buen año para la renta variable. «Con un entorno favorable -la economía crece, sube la previsión de beneficios empresariales y algunas agencias de calificación han mejorado la perspectiva creditica- la Bolsa española goza de buenos pronósiticos por parte de los analistas».

Fuente: El País