Putin, con trabajadores de Yamal LNGPutin, con trabajadores de Yamal LNG AFP

Apenas dos días después de confirmar que busca otra reelección para seguir al frente de Rusia hasta 2024, Putin no dejó pasar la ocasión de enseñar músculo en la carrera internacional por los preciados recursos que guarda el Ártico. En el puerto de Sabetta, dio inicio a la primera operación de carga al apoyar la palma de su mano en un dispositivo de reconocimiento de imágenes, en una ceremonia al gélido aire libre. Y adelantó que pretende involucrar a la industria militar en apuesta por las fábricas de licuefacción en Rusia. «Hay que aumentar la producción de gas natural licuado [GNL], pero su producción y exportación no deben conducir a un debilitamiento de las posiciones conquistadas [por Rusia] en el mercado de este combustible por gasoductos. Hay que planificar el trabajo de tal modo que nuestros proyectos de GNL no compitan con nuestro gas por tuberías y crear condiciones para que ambas vías se complementen», manifestó.

MÁS INFORMACIÓN

La nutrida delegación de altos directivos y embajadores de varios países -el español Ignacio Ybáñez entre ellos-, que ha acompañado al líder ruso incluyó a los ejecutivos de Gas Natural Fenosa Victor Tuñón y Carlos Humphrey. En virtud del contrato suscrito entre la compañía española y el consorcio ruso a finales de 2013, Yamal LNG le suministrará hasta 3.200 millones metros cúbicos al año, lo que equivale a más del 10% de la demanda anual de gas de la economía española. Y de ese modo, incorporará a Rusia a la decena de países de los que se surte España, que cubre casi el 60% de sus necesidades a través del gasoducto con Argelia.

Fuentes de la compañía española indicaron que, si no surgen imprevistos, el primer metanero contratado por Gas Natural zarpará el próximo verano. Recientemente, el consorcio Yamal LNG valoró en más de 30.000 millones de euros el contrato que le liga con la firma española durante 25 años, según informó la agencia rusa Interfax. No es el único vínculo español con el proyecto: el inversor Gerard López adquirió en 2015 el 50% de Rise Capital, la empresa sueca que gestiona buena parte de las inversiones en infraestructuras en la península de Yamal.

Rumbo a China

El cargamento inaugural, como la mayoría de los contratados por Yamal LNG, irá a Oriente. Más concretamente, a las plantas de regasificación de la china CNPC, que ha puesto un 20% del capital en el consorcio, cuyo accionariado lidera la rusa Novatek (50,1%) y completan la francesa Total (20%) y el fondo SRF, también chino. Novatek, la compañía privada que dirige Leonid Mijelson –el hombre más rico de Rusia según la revista Forbes y uno de los oligarcas más exitosos durante el régimen de Putin-, ha subrayado en las últimas semanas el «apoyo del Estado» ruso y también el «simbolismo» del primer envío a China.

El consorcio valora en 30.000 millones el contrato a 25 años con Gas Natural

El respaldo financiero ruso a la ingente inversión necesaria (27.000 millones de dólares, unos 23.000 millones de euros) para poner en marcha la primera planta de licuefacción de gas natural en el Ártico fue imprescindible. Como lo fue el respaldo chino para mantener el proyecto vivo cuando las sanciones occidentales por la invasión de la península ucrania de Crimea cerraron el grifo del crédito a Novatek. Hace dos años, Silk Road Fund (SRF), que ya había prestado dinero al consorcio, entró en el accionariado con la adquisición del 9,9% del capital por 1.200 millones de dólares. Y el año pasado, dos bancos chinos pusieron otros 12.000 millones de dólares en préstamos, lo que junto a un crédito menor (400 millones) de una entidad japonesa cubrió las necesidades de financiación del proyecto, que ya contaba con 6.000 millones captados en Rusia.

El gas del yacimiento de Iuzhno-Tambei (con unas reservas de más de 900.000 millones de metros cúbicos probadas y probables), licuado a muy baja temperatura (-162º) para reducir su volumen y permitir su transporte en colosales buques metaneros, tendrá como destino preferente la región de Asia-Pacífico, y singularmente, China. El consorcio tiene prácticamente vendida toda su producción prevista (16,5 millones de toneladas anuales) mediante contratos de larga duración. Y excepto el 15% reservado a Gas Natural Fenosa, el resto irá destinado a la región asiática, en la que la demanda de este combustible crece a marchas forzadas.

Cuando esté a máximo rendimiento (en 2018 saldrán 5,5 millones de toneladas), en un par de años, la planta de Yamal LNG duplicará la producción de gas natural licuado ruso, ahora en 14 millones de toneladas al año. El Gobierno ruso impulsa con exenciones fiscales y apoyo financiero esta tecnología para completar su habitual oferta a través de gasoductos. En las próximas dos décadas pretende quintuplicar su producción, para elevar del 4% al 15% su cuota en las exportaciones mundiales de gas natural licuado, que domina Qatar con casi un tercio de las ventas globales.

En memoria del amigo francés

«Rusia ha perdido un amigo». Así lamentó en 2014 Vladimir Putin la muerte de Christophe de Margerie, entonces consejero delegado de la petrolera francesa Total, que falleció en un accidente de avión, cuando despegaba de un aeropuerto moscovita. En su recuerdo, el primer metanero rompehielos del mundo llevará su nombre.

El primer cargamento de gas del consorcio Yamal LNG partirá a China en el Arc7 Christophe de Margerie. El que fuera presidente de Total no solo fue el primer aliado de Novatek en su aventura ártica. El Gran Bigote, como se le conocía, miembro del consejo consultivo de inversiones extranjeras en Rusia, se opuso a las sanciones occidentales por el conflicto ucranio.

Fuente: El País