Dropbox protagonizó en la apertura de Wall Street el mayor estreno bursátil de una tecnológica este año. El servicio de almacenamiento de datos en la nube que rivaliza con Drive de Google, OneDrive de Microsoft o Box fijó la oferta en 21 dólares la acción. A ese precio sus dueños recaudaron 756 millones y la compañía conseguía una valoración inicial de 9.180 millones. Arrancó con una subida del 38% y en los primeros minutos de negociación se apreció hasta un 45%.

La demanda por sus acciones hizo que el valor final de la operación estuviera por encima del rango de 18 a 20 dólares que se dio como orientación a comienzos de esta semana. Dropbox cotiza en el Nasdaq bajo el símbolo DBX. Su estreno sirve, además, de anticipo para la próxima colocación de la plataforma musical Spotify, que tiene previsto empezar a cotizar el 3 de abril para dotarse de liquidez para financiar su expansión.

El estreno se produce 11 años después de su fundación. En total, ofreció 36 millones de títulos. A esta cantidad se suman 5,4 millones de acciones para los bancos que dirigen la operación. Dropbox se presenta como una plataforma global de “colaboración” que permite a los usuarios y a los grupos trabajar compartiendo archivos. En la actualidad cuenta con más de 500 millones de cuentas, que le aportaron ingresos de 1.107 millones en 2017.

La cifra de negocio de la compañía de San Francisco está creciendo a un ritmo anual del 35%, de acuerdo con la media de los últimos dos años. Pese a este rendimiento, debe demostrar aún que es rentable. El pasado ejercicio registró pérdidas de 112 millones. Es una mejora considerable, en todo caso, frente a los 210 millones en 2016 y los 326 millones en 2015. El año pasado generó un flujo de caja positivo de 305 millones.

Es la mayor colocación de un “unicornio” de Silicon Valley desde el estreno de Snapchat el pasado año, en la que sus propietarios recaudaron 3.900 millones. El debut bursátil de Dropbox, sin embargo, coincide con un momento de tensión en el sector tecnológico por la fuga de datos de Facebook. El reto para este servicio es que no tiene una ventaja competitiva única respecto a Google, Microsoft y Amazon.

Solo huvo cinco estrenos de firma tecnológicas este año en el Nasdaq. Andrew Houston, cofundador y consejero delegado de Dropbox, tenía una participación del 25% de la compañía en el momento de la oferta, valorada de 2.100 millones. La rebaja al 24%. El fondo de capital riesgo Sequoia Capital controlaba el 23%. Los otros grandes accionistas son Arash Ferdowsi, Accel y T. Rowe Price.

Fuente: El País